Con su rica, jugosa y sabrosa base de ragù (salsa de carne picada y tomate), esta pizza es una auténtica delicia.
Receta de: @nopizzaiolo
Prepara tu ragù favorito y úsalo como base. A continuación, añádele una cantidad generosa de hojas de albahaca fresca.
Añade un chorrito de aceite de oliva y un poco de fior di latte fresco.
Por último, rocía 2-3 cucharadas de salsa bechamel cremosa al ajo (para hacerla, yo simplemente cocí en mantequilla un poco de ajo laminado antes de incorporar la harina y la leche).
Hornéala a 450 °C a fuego lento durante unos 90 segundos, o hasta que la corteza quede a tu gusto.
Adereza con una buena cantidad de parmesano fresco y ¡voilà! Tal vez esta sea una de las pizzas más sabrosos que jamás hayas probado.